-¿Qué haces?
+Ver como llueve, y pensar...
-¿Y en qué piensas?
+¿Recuerdas cuando te prometí que nunca más me acordaría de él?
-Si ¿por qué lo preguntas?
+He roto mi promesa, era algo imposible.
-Pero llegará un día en el que te hará daño su recuerdo.
+Ya lo sé pero recordarlo es como impedir que llueva.
-¿Cómo?
+Si, aunque no quieras que llueva seguirá lloviendo sin parar hasta que llegue un momento en que pare por sí misma, es lo mismo que a mi me pasa con el, seguiré recordándolo hasta que llegue un momento en que esté preparada para olvidarlo, o hasta que pueda estar junto a él y no tenga la necesidad de recordarlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario